Apenas 24 horas ocurrió uno de los resultados en los que muy poca gente se podía esperar con el triunfo de Iker Larrazabal sobre Jokin Altuna en el campeonato Manomanista.
El vigente campeón de segunda categoría del Manomanista Iker Larrazabal la pasada semana eliminó a Joseba Ezkurdia y sin nada que perder salió ayer a la cancha en el Astelena de Eibar ante Altuna. En los momentos difíciles en el Gurea de Azkoitia ante el de Arbizu, se le vio con intenciones y con esas garantías de poder competir. Ante Altuna, comenzó con un 5-1 en contra, pero no tuvo piedad y también compitió sin ningún tipo de presión. Mostró sus armas y su capacidad de que puede hacer frente a cualquiera y sometió a todo un Altuna. Algo que está en manos de muy pocos. Una situación que estos últimos años a nivel individual muy pocas veces se ha dado además de que por parejas también suele ser complicado ante el de Amezketa.
Esto puede ser un arma de doble filo y de ahí que escriba estas líneas. Me encuentro muy feliz por haber visto que Larrazabal es capaz de ser un pelotari de primera. Baiko lo lleva intentando desde hace algunos años, pero el proceso tiene que ser laburado. Un Iker que lo llevo siguiendo desde que era un chaval, y la primera vez que lo pude ver en directo fue en el memorial Juanito Álvarez de Egia. Para mi asombro, pegó una volea que pasó botando el seis. Como podéis esperar me fui estupefacto en el recorrido a casa rememorando en mi memoria ese golpeo vez tras vez.
Espero que su gente cercana le esté protegiendo estos días. Todo el mundo va a hablar ahora del alavés pero Iker no se puede descentrar. Ahí está el trabajo de los suyos. Los mensajes que le entren felicitándole también pueden ser una tarea nada agradable. El viernes, ya viene un partido durísimo ante Darío y por tanto tiene que salir muy enchufado. Ante pelotaris como Altuna y Ezkurdia salió sin absolutamente nada que perder, pero sobre todo después de la hazaña de vencer a Jokin, el verdadero campeonato empieza para Larrazabal. Ese campeonato en el que de verdad se ve capaz de poder aspirar a cosas grandes. De verse entre los grandes y de poder estar optando por las txapelas. Ya ha ganado al campeón, si lo puede hacer ante él, lo puede hacer ante mucha gente.
Con lo cual, los dos próximos partidos los tiene que afrontar de la misma manera. Soy conocedor de que es muy complicado, ya que la cabeza empieza a dar vueltas, y ya habiendo vencido a Altuna, tienes que ganar a todos y ya alzar la txapela. Mucho dicharachero podría enunciar esas palabras y que puedan llegar a Iker. Por tanto, esa protección también debe estar por parte de sus allegados. Esa labor psicológica y que el chaval pueda seguir con los pies en el suelo. Trabajando cómo lo está haciendo y sin temer a nada.
Es más, si sale con dudas o con los pensamientos enrevesados, Darío y Javier Zabala son dos pelotaris que te ponen en grandes aprietos y no perdonan absolutamente nada.
El triunfo ante Jokin es algo más que interesante para presenciar de que Iker puede hacer grandes cosas en este deporte. Como digo, con los pies en el suelo y con protección. La cuerda del éxito es muy corta y efímera. Por tanto, el trabajo diario tiene que seguir y quizás ahora más que nunca, sobre todo a nivel psicológico. Como decía, me alegro muchísimo por Iker y que siga haciéndonos disfrutar como lo ha hecho tanto contra Altuna como ante Ezkurdia. Será una enorme noticia para él pero también para los pelotazales.
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